Despertar temprano sin que la primera idea en la cabeza sea “¿qué voy a ponerme para ir a trabajar?” o “Ya voy tarde para la junta”. Planear los pendientes laborales del día mientras preparas el desayuno o verificas la conexión a Internet previo a la primera clase virtual de los hijos, son escenas de la nueva normalidad que ahora forman parte de la rutina diaria de quienes trabajan, a más de un año de que la pandemia llegó a nuestro país.
Hemos cumplido más de un año del inicio del confinamiento en México y ha sido un detonante de una transformación en el mundo laboral, que de por sí ya venía mostrando algunos cambios positivos en favor de los colaboradores. PWC México, realizó la encuesta “Nueva Normalidad, nuevas formas de trabajo”, la cual reveló que, antes de la aplicación de las medidas de distanciamiento social debido a la contingencia sanitaria, 46% de los encuestados no era parte de esquemas de trabajo remoto.
El teletrabajo llegó para quedarse
Y hoy día, nadie duda que estas modalidades seguirán presentes en la forma en la que trabajamos. El 97% de los encuestados quiere que el trabajo a distancia se mantenga de forma permanente.
De acuerdo con la segunda edición de la Encuesta sobre el Impacto Generado por COVID-19 en las Empresas (ECOVID-IE) realizada por el INEGI, 44.8% de las grandes empresas que operan en el país implementaron el trabajo remoto como una medida, en respuesta a la pandemia. Se han aplicado esquemas similares por el 19% las PyMES y por el 11.2% de los micronegocios.
La Encuesta regional 2020: ¿Cómo se transformó el ámbito laboral y familiar?, donde colaboró el Centro de Investigación de la Mujer en la Alta Dirección (CIMAD) de la IPADE Business School, señala que México es el país de Latinoamérica en el que el teletrabajo ha tenido mayor aceptación y donde las expectativas de continuar con esta modalidad son altas. La encuesta reveló que el 68% de los mexicanos se han beneficiado con esquemas de home office. Para el 26%, era la primera vez que experimentaban el trabajo a distancia.
El reto de la nueva normalidad
La nueva normalidad puso a prueba y retó al límite a las culturas organizacionales de las empresas, para implementar dinámicas y políticas exitosas de teletrabajo, que les permitieran mantener el engagement dentro de la organización y lograr buenos resultados, alineados a las prioridades del negocio.
Empresas grandes, medianas y pequeñas han demostrado que, un año después de mandar a su personal a trabajar en casa, se puede ser productivo y cumplir con objetivos. Aun sin estar en un entorno físico de oficina.
Un caso de éxito es Mondelēz México, quien desde el primer momento en el que se tuvo conocimiento de los primeros casos de Covid-19 en el país, tomó la decisión de que los colaboradores administrativos trabajaran desde casa. Además se encargó de impulsar una serie de acciones para apoyar el nuevo reto del Home Office, priorizando el balance vida-trabajo.
Las acciones de una gran empresa
La implementación del home office, que ya era parte de su modelo de trabajo, fue el primer paso. También, puso en marcha una campaña interna llamada “Mondelēz está contigo”, donde la compañía dio total prioridad al bienestar emocional de los empleados, a través de:
- Diferentes programas de comunicación interna, enfocados en reorganizar la cultura laboral, que incluyen; podcasts semanales y un micrositio de intranet, con consejos sobre trabajo remoto.
- Actualizaciones sobre los proyectos de la compañía.
- Protocolos de higiene y salud.
- Actividades para realizar en familia.
De forma paralela, en los meses de septiembre y octubre la compañía desplegó cursos, webinars y capacitaciones en línea para apoyar el bienestar y la salud mental de los colaboradores en esta coyuntura.
Además de sesiones en vivo de meditación y asesoría psicológica con otros miembros de la organización, para tratar temas como “Controlar la ansiedad y preocupación en tiempos inciertos” y “Técnicas para mejorar el bienestar y la salud mental”.
Asimismo, se reforzó el “Programa de Asistencia al Empleado” que, vía telefónica, provee orientación psicológica profesional, gratuita y confidencial, las 24 horas del día los 365 días del año.
Todas estas acciones hablan de la gran velocidad con la que se ha reinventado la compañía y de su compromiso permanente con la salud, seguridad y bienestar de sus colaboradores.
Al mismo tiempo, reflejan el cumplimiento de las reformas al artículo 311 de la Ley Federal de Trabajo, en materia de teletrabajo o home office. Ejemplo de ello, es el apoyo económico que a partir de este año comenzó a recibir el personal administrativo por concepto de ayuda de conectividad.
¿Estaban preparadas las empresas?
De acuerdo con Víctor Bravo, líder en Gente de Mondelēz México, la compañía estaba preparada para una situación como la que estamos viviendo desde hace un año y ha logrado mantener a los equipos de trabajo funcionales en todo momento. Pues la empresa ya contaba con una política interna de trabajo remoto desde 2016.
Víctor Bravo, líder en Gente de Mondelēz México.
“La flexibilidad es la clave para que la compañía mantenga la excelencia operacional y para que los colaboradores puedan sentirse integrados y alineados a objetivos. Esto va más allá de permitirles trabajar en casa; se debe dar un acompañamiento e impulsar la cohesión de los equipos, a través de programas 100% enfocados en que logren una armonía entre su vida personal y laboral”.
Y para lograr este balance, el primer paso es darse cuenta de que la vida en el trabajo se ha entremezclado con la vida personal y quienes tienen hijos pueden dar cuenta de ello. Pilar Sánchez, la directora de Marketing de la empresa, es un ejemplo de que la libertad para organizar la rutina del día a día puede detonar mayor productividad y tiempo de calidad en familia.
Pilar Sánchez, directora de Marketing.
“La flexibilidad que ofrece la compañía ha permitido, por ejemplo, a los que tenemos hijos, organizar nuestro tiempo en función de las clases virtuales de los niños, las labores en la casa u otros pendientes personales.
En mi experiencia, la dinámica laboral no se ha visto afectada porque todos en mi equipo trabajamos bajo resultados. Saber que eres dueña del 100% de tu tiempo, te permite administrar mejor tus prioridades y disfrutar más a quienes quieres”.
Teletrabajo: un beneficio para los colaboradores
Para quienes son jóvenes, estar inmersos en una cultura laboral con esta visión y apertura ha sido un gran beneficio.
De acuerdo con el reciente estudio “Home office en México en tiempos del Covid-19”, elaborado por la Asociación de Internet MX y OCC mundial, las personas de entre 18 y 24 años son el grupo que más trabaja con las nuevas medidas de home office, donde el 59% de ellos labora entre 5 y 8 horas, seguidos del 57% de las personas de entre 25 y 29 años.
En línea con ello, esta compañía, con un 59% de personal Millennial, ha reforzado su apuesta por el talento joven, pues saben que son un grupo poblacional con una visión diferente que está rompiendo esquemas.
De hecho, algunos colaboradores jóvenes han llevado el teletrabajo a otro nivel y han pasado todo este tiempo en sus ciudades de origen y con sus familias. Sin necesidad de seguir radicando en la Ciudad de México -donde se encuentran las oficinas corporativas- en sus “departamentos de solteros”.
Este es el caso de Erick Azpeytia, Sr. Analyst Marketing de Clorets:
“Yo soy de Tampico y llevaba ya ocho años viviendo en CDMX. Gracias al trabajo remoto, pude regresar a casa y trabajar desde ahí, esto me ha permitido ahorrar en renta y convivir con mi familia en estos tiempos difíciles. La dinámica de trabajo en equipo se adaptó rápido a las nuevas circunstancias, la constante por parte de nuestros líderes ha sido la flexibilidad y empatía a las necesidades de cada persona; sin duda esto nos motiva a seguir entregando buenos resultados y fortalecer nuestro compromiso con Mondelez México”.
Estas historias reflejan el reto que muchas empresas tienen para avanzar hacia esquemas y formas de trabajo, que permiten lograr el balance y hacer más llevadera la pandemia.
